miércoles, 29 de septiembre de 2010

Jovenes Cristianos: Recordando

Jovenes Cristianos: Recordando: "Con el paso del tiempo avanzamos en nuestra vida cristiana, vamos adquiriendo compromisos, retos, crecemos en conocimiento, en amistades, e..."

Jovenes Cristianos: El camino que debemos seguir

Jovenes Cristianos: El camino que debemos seguir: "Imaginemos nuestras vidas como un largo camino que debemos recorrer. Nosotros somos los que escogemos en que camino queremos caminar. Puede..."

Jovenes Cristianos: Los videojuegos, las peliculas de terror son malos...

Jovenes Cristianos: Los videojuegos, las peliculas de terror son malos...: "Ultimamente me han llegado comentarios y preguntas sobre los siguientes temas: Me encantan las películas de terror, y al verlas no me pasa ..."

Jovenes Cristianos: El uso del celular en el culto es peor que vender ...

Jovenes Cristianos: El uso del celular en el culto es peor que vender ...: "Es tu fiesta de cumpleaños y todos están alagándote y homenajeándote, pero de pronto uno de tus mejores amigos esta mensajeandose por el cel..."

Jovenes Cristianos: Paternidad...El Diseño de Dios

Jovenes Cristianos: Paternidad...El Diseño de Dios: "Colegas amados en Cristo, vengo completamente admirado de estar junto a grandes hombres de la fe, grandes obreros que llevan una vida de de..."

Jovenes Cristianos: Cuando creemos que Dios no escucha los deseos de ...

Jovenes Cristianos: Cuando creemos que Dios no escucha los deseos de ...: "¿Que pasa cuando nosotros en oración le exponemos a Dios los deseos que tenemos y las cosas que queremos y no encontramos una respuesta pro..."

Jovenes Cristianos: Guarda tu corazón

Jovenes Cristianos: Guarda tu corazón: "Prov 4:23 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida.Si bien este versículo tiene muchas aplicaciones quisiera d..."

Jovenes Cristianos: No sirvo para nada! Soy el Ultimo de la clase

Jovenes Cristianos: No sirvo para nada! Soy el Ultimo de la clase: "Cuando alguien tiene problemas en la escuela y no entiende lo que el profesor/a explican, ni saca buenas calificaciones; siempre se le vien..."

Jovenes Cristianos: Es usted una amenaza para Satanas?

Es usted una amenaza para Satanas?: "La Biblia dice que en dos ocasiones diferentes Satanás pidió permiso al Señor para probar a un creyente (Job 1.6-12; Lc 22.31-34). En ambas,..."

Clama - Nancy Amancio con las letras

NANCY AMANCIO ESTA ES MI FE

HR: NANCY AMANCIO...ESTO ES CONFIAR....

NANCY AMANCIO- "Cuando Oras"

Nancy Amancio Arrebato

NANCY AMANCIO

Rocio Crooke - Tu Arte en Mi by Revolucionando

HERN: ROCIO CROOKE....ESPIRITU SANTO....

Al Modo Mio - Rocio Crooke

Ingrid Rosario - Concierto Expoli 2007 Vida Extrema Podcast

VENCE EN MI

QUEDATE EN MI, INGRID ROSARIO

Vence en mi Ingrid Rosario

Ingrid Rosario | Eres Mi Respirar

Ingrid Rosario ~ Quiero estar en tu presencia

Te veo en tu trono

Abba Padre

Tu sueño Cuidare - Marco Barrientos

No desmayes - Marco barrientos

YO SOY -- DESCANSA EN MI -- MARCO BARRIENTOS--TU SUEÑO CUIDARE

con tu mano me tocaste

Rojo Ok

ROJO (NUEVO VIDEO) ALABAD A DIOS

martes, 28 de septiembre de 2010

Reflexiones: No eres el único que se desanima...

jueves 19 de agosto de 2010 |

Hay momentos de desanimo, momentos de enfriamineto, de cierta pasividad que son comunes en la vida de los que seguimos a Cristo. Te levantas y hay algo para hacer antes de tu devocional, cuando inicialmente  ocupaba ese primer lugar. De carrera vas en el carro por los afanes y sino en la buseta repietiendote una oración que no es el Padre Nuestro pero es una que rezas tan igual que hace que te reclames, hasta en eso estoy mal, ya no se  orar.

Bueno, no eres el único que pasa por eso. Pero tampoco te puedes quedar allí, porque si hay algo en ti que hace sentir vacio por falta de comunión con Dios, es el espirítu Santo. Y ojo, que eso es señal de que no estas solo y que Dios sigue a tu lado reanimandote para que no desmayes.

Cuando nos dejamos llevar por lo que vemos  nuestra fe mengua, nos desanimamos, o caso contrario se nos da la bendición y menguamaos espiritualmente. Por eso no tires la toalla. Velad  y orad dice la palabra aun cuando el espiritu esta dispuesto pero la carne es debil hazlo.  No te dejes dominar por tu carne, por tu cansancio, por tus pensamientos, por el que diran y deseos de hacer. Dios nos dio un espirítu de dominio propio.

Hazlo. Ora, reparte esas hojas de vida, empieza ese cuidado personal, el cambio de relaciones que te apartan de Dios, inicia una nutrición espiritual adecuada,  vuelve a la iglesia donde Dios te mostro su gloria, quierete, arreglate, invita a un helado al personaje  que te quita el sueño, despierta tu que duermes y vuelve a mi, que yo me encargo te dice Jesucristo, el amigo que no falla, y no es frase de cajón, es frase real.

Así dice el señor, buscadme y me hallaras, encomienda a mi tus caminos y yo enderezare tus sendas, alejate  del mal y se sabio. Porque hoy empieza tu mañana.

Amigo, hermano, ora, buscad a ese amado Dios que un día descuidaste, él sigue allí, renueva tu promesa de fe, y entregate en cuerpo y alma para que  tu nombre no empiece a verse borroso en su libro de la vida.



Reflexión: Perdóname...

martes 21 de septiembre de 2010 |

"y perdona nuestras ofensas así como nosotros perdonamos a quienes nos ofenden"


Extraerse de la realidad que acosa no es facil. Es muy facil mandar a alguien a creer en la promesa que Dios nos hace, pero inyectarselo tal cual uno lo tiene es tarea de Dios y su Santo Espirítu.


Hasta a nosotros los cristianos nos es dificil creer porque la humanidad propia es tangible pero lo que queremos alcanzar no. Es cuestión de fe. Y la fe trae perdón, paz y restauración.


La fe viene por el oir, y el oir por la palabra de Dios. Por eso es fundamental empezar primero con disponerse, segundo leer la biblia, y tercero perdonar. Sin perdón no hay visión, con resentiminto no hay camino, eso es un obstaculo que no deja ver más allá del puente. El perdón, perdonar y ser perdonado es la ruta del exito.


La falta de perdón, es una espina que pulla el corazón, recordar que fuimos heridos, que fuimos quizas atropellados con palabras o acciones hipocritas, nuestra mente nos muestra como una fotografia el momento y los detalles exactos.

La tarea es, no recordar, es perdonar. Ojo, que hay un dicho que dice perdono pero no olvido. Empecemos por perdonar de verdad aún cuando la persona no se entere de ello. No es acto de gloria el decir "yo soy rencoroso, yo no perdono", eso es un acto de insensatez, pues el único perjudicado eres tu. Y "El odio es un veneno que te tomas tu, esperando que el otro se muera".

Oremos:

"Dios, ayudanos a perdonar a quienes nos ofenden, y permite que me perdonen  quienes yo he ofendido. Limpia mi alma, y examina mis pasos, yo pongo mis fuerzas en ti, tu pon tu voluntad en mi corazón"











Hace dos semanas conocí a una persona muy especial, en el hospital de Antofagasta, en una sala hay una abuelita , hermana en Cristo. Ella es ciega, no tiene sus cuerdas bucales a causa de una enfermedad a la tiroides.
Pero lo que mas me nos marcó (la conocí por medio de mi polola priscilla que va de mucho antes a visitarla) es que apesar de todo, postrada en una cama alaba al Señor con toda su corazón.
Para meditar, si tienes la bendición de estar sano, puedes ver o hablar, nunca dejes de alabar a Dios.
Y si crees que tu problema te esta aplastando, solo medita en que siempre hay alguien con un problema mayor.
Para la abuelita Guillermina, siempre no pide que le leamos el salmo 139:

1 Oh Jehová, tú me has examinado y conocido.
2 Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme;
Has entendido desde lejos mis pensamientos.
3 Has escudriñado mi andar y mi reposo,
Y todos mis caminos te son conocidos.
4 Pues aún no está la palabra en mi lengua,
Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda.
5 Detrás y delante me rodeaste,
Y sobre mí pusiste tu mano.
6 Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí;
Alto es, no lo puedo comprender.

7 ¿A dónde me iré de tu Espíritu?
¿Y a dónde huiré de tu presencia?
8 Si subiere a los cielos, allí estás tú;
Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás.
9 Si tomare las alas del alba
Y habitare en el extremo del mar,
10 Aun allí me guiará tu mano,
Y me asirá tu diestra.
11 Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán;
Aun la noche resplandecerá alrededor de mí.
12 Aun las tinieblas no encubren de ti,
Y la noche resplandece como el día;
Lo mismo te son las tinieblas que la luz.

13 Porque tú formaste mis entrañas;
Tú me hiciste en el vientre de mi madre.
14 Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras;
Estoy maravillado,
Y mi alma lo sabe muy bien.
15 No fue encubierto de ti mi cuerpo,
Bien que en oculto fui formado,
Y entretejido en lo más profundo de la tierra.
16 Mi embrión vieron tus ojos,
Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas
Que fueron luego formadas,
Sin faltar una de ellas.
17 ¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos!
¡Cuán grande es la suma de ellos!
18 Si los enumero, se multiplican más que la arena;
Despierto, y aún estoy contigo.

19 De cierto, oh Dios, harás morir al impío;
Apartaos, pues, de mí, hombres sanguinarios.
20 Porque blasfemias dicen ellos contra ti;
Tus enemigos toman en vano tu nombre.
21 ¿No odio, oh Jehová, a los que te aborrecen,
Y me enardezco contra tus enemigos?
22 Los aborrezco por completo;
Los tengo por enemigos.
23 Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón;
Pruébame y conoce mis pensamientos;
24 Y ve si hay en mí camino de perversidad,
Y guíame en el camino eterno.

La libertad del perdón


Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, 
os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial.
Mateo 6:14

La falta de perdón es una fuerza destructiva e insidiosa, que tiene muchos más efecto sobre el que no perdona que sobre el imperdonado. Un gran ejemplo de esto está en la experiencia de uno de los más sobresaliente intelectos de la historia, Leonardo da vinci.

Justo antes de comenzar a trabajar su pintura mural la última cena, tuvo una violenta discusión con otro colega pintor. Leonardo estaba tan enojado y amargado, que decidió usar el rostro de su enemigo como la cara de judas, y así vengarse del hombre poniéndole en una situación de infamia y burla para las siguientes generaciones.

La cara de judas fue, por tanto, una de las primeras que terminó, y enseguida todos reconocieron en él al pintor con el que discutió. Sin embargo, cuando intentó pintar el rostro de Jesucristo, Leonardo no podía progresar. Al parecer algo lo desconcertaba, retrasándolo y frustrándolo en sus esfuerzos. Al fin, llegó a la conclusión de que lo que le estorbaba y frustraba era que había pintado a su enemigo en la cara de judas.
Cuando pintó encima del rostro de su enemigo en el retrato de Judas, comenzó de nuevo con el rostro de Jesús. Esta pintura mural se convirtió en un gran éxito que se ha aclamado a través de los siglos.
Uno no puede pintar los rasgos de Jesucristo en nuestra vida y pintar al mismo tiempo otra cara con los colores de la enemistad y el odio.

Si albergamos la falta del perdón y la amargura, perdonemos a nuestro ofensor y pongamos la situación en las manos de Dios. Pidámosle que nos limpie de esos sentimientos negativos y nos libre de sus ataduras. Cuando perdonemos, seremos perdonados y libres para vivir nuestra vida con paz interior

Definamos a una mujer cristiana

¿Cómo es una mujer cristiana?

Es una persona con razón e inteligencia creada a la misma imagen de su Hacedor. Somos producto de la maravillosa creación de Dios.

Y de la costilla que Jehová Dios tomó al hombre, hizo una mujer. Génesis 2:22
Mirad cual amor nos ha dado el Padre para que seamos llamadas hijas de Dios. 1 Juan 3:1
Pues todas sois hijas de Dios por la fe en Cristo Jesús. Gálatas 3:26

¿Cómo debe ser?

Sabia
Abre su boca con sabiduría Proverbios 31:26
Honesta
Las mujeres asimismo sean honestas, no calumniadoras 1 Timoteo 3:11
Bondadosa
Muchas mujeres hicieron el bien; más tú sobrepasas a todas Prov. 31:29
Humilde
Humillaos delante del señor y él os exaltará Santiago 4:10
Alegre
Regocijaos en el Señor siempre. Otra Vez digo regocijaos Filipenses 4:4
Santa
Sed santas porque Yo Soy Santo 1 Pedro 1:16


¿Qué debe saber?

Qué Jesús me ama
Con amor eterno te he amado Jeremías 31:3
Qué murió por mí
Porque de tal manera amo Dios al mundo que ha dado a su Hijo unigénito para que todo aquel que en el cree no se pierda más tenga vida eterna Juan 3:16
Que perdona mis pecados
…Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados 1 Juan 1:9
Que vendrá para llevarnos con Él
Vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy vosotros también estéis Juan 14:3


¿Qué debe hacer?

Caminar con Jesús
Caminar con Jesús es compañerismo constante. Caminar con Jesús es permitir que Él participe en nuestras tareas y actividades en el hogar, trabajo o escuela. Es contar con su presencia en todo momento y lugar
Orar
Estudiar
Confiar en Dios
Guardar sus mandamientos
Predicar
Ayudar a otros
Dorcas abundaba en buenas obras Hechos 9:36



¿Cómo debe relacionarse con los semejantes?

Soportándoos unos a otros Colosenses 3:13.
Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres Filipenses 4:5

¿Que espera Dios de mí?


Ya no vivo yo más vive Cristo en mí Gálatas 2:20

MUJER VIRTUOSA


1. Su estima sobrepasa por mucho a cualquier objeto o cosa que se considere valiosa en este mundo.

2. Su esposo confía en ella porque sabe que llevará con bien todo lo que haga. Sabe que el dinero que tiene con ella no le traerá perdida, sino ganancias porque ella sabe administrarlo bien, no es derrochadora y economiza.

3. Es una mujer trabajadora, laboriosa, de espíritu impetuoso, con gran energía, voluntad y empeño.

4. Busca buenos precios en el mercado y lo mejor, no desperdicia el dinero, ni los recursos que tiene.

5. Da valor a lo que tiene, lo cuida y lo mantiene.

6. Se ciñe aún en medio de las dificultades. Saca fuerzas de donde parece no tener, se auto motiva. Aún sin aliento o agotada sigue, es luchadora, ¡no se rinde!

7. Observa como va en su vida, su hogar, su esposo, sus hijos y familia. Es emprendedora. Toma tiempo para ella, para el análisis de las cosas que hace o inicia y considera si va bien en lo que está llevando a cabo. Está en estado de alerta, vigilancia, no baja la guardia aunque sea de noche.

8. Es misericordiosa, por tanto ayuda al que ve en necesidad. Extiende su mano brindando auxilio al menesteroso.

9. Se prepara para el mal tiempo y a estar preparada es una mujer segura; por tanto no se intimida ante lo que venga. Permanece confiada porque ella sabe que hizo lo que tenía que hacer.

10. Sabe vestirse y arreglarse bien, por ende anda bien ataviada.

11. Es tan buena esposa que su marido es conocido y estimado por los demás. Ella hace que su marido se sienta orgulloso de haberla escogido porque resalta con su buena presencia y actitud. Ella provoca que su esposo sea mejor.

12. Es una mujer que es en su esencia posee fuerza. Es honorable, procede con rectitud, por tanto es estimada por todos.

13. Es optimista, trabaja y espera lo mejor, por tanto, sonríe con tranquilidad y seguridad ante el futuro.

14. Cuando habla lo hace con aplomo, sabiduría y cuidado de tal manera que los demás la escuchan. Sabe decir las cosas, habla con justicia. Es misericordiosa cuando emite juicios y habla endulzando sus palabras con sensatez.

15. Considera cómo van las cosas en su casa. No desperdicia la comida, ni la come sin motivos.

16. Sus hijos dan testimonio y se gozan en llamarla bienaventurada porque es feliz. Su marido aprecia sus dones y virtudes, por tanto, la estima, honra, la alaba y respeta, pero sobre todo la ama.

17. Sobrepasa a otras mujeres que hicieron el bien porque cada día que pasa procura ser mejor, va encaminada hacia la excelencia.

18. La mujer que define el proverbista es una que teme a Jehová. Es alabada porque más que tener gracia y hermosura, tiene a Dios en su corazón y vida y eso hace que proyecte una luz y una belleza incomparable. Es alabada porque sus hechos y su práctica de vida hablan más que lo que ella puede decir.

SIGUIENDO A JESUS

SIGUE A JESUS PARA HEREDAR LA VIDA ETERNA Y COMO RECOMPENSA RECIBIRÁS CIEN VECES MAS LO QUE HAYAS DEJADO. "...cuando el hijo del hombre se siente en el trono de su gloria, vosotros que me habeis seguido también os sentareis... y cualquiera que haya dejado casas, o hermanas, o hermanos, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, POR MI NOMBRE, recibirá CIEN VECES MÁS, y heredará la vida eterna". Mateo 19:28-29

Rocío ツ
Toma de Decisiones - Corriendo Riesgos
Ben lucha con la toma de decisiones. La marca de su próximo carro, un cambio potencial de carrera, o comprometerse en una relación a largo plazo, sólo aumentan la ansiedad de Ben. ¡Si tan sólo nuestras decisiones no tuvieran riesgos, garantizándonos el resultado deseado! La toma de decisiones nos obliga a:

Aceptar la responsabilidad por el éxito o fracaso de nuestra decisión.
Experimentar directamente cómo esa decisión ayuda o daña a otros.
Identificar la fuente más confiable de sabiduría que nos equipe para tomar esas decisiones.

Toma de Decisiones - ¡Perder la Cabeza!
La toma de decisiones basándose sólo en la naturaleza humana frecuentemente produce serias consecuencias. Cuando nuestros impulsos egoístas influencian las decisiones, poco después viene el desastre. En la Biblia, Abram (Abraham) le ofreció a su sobrino, Lot, la mejor tierra que por derecho le pertenecía a Abram (Génesis 13:8-11). Lot tomó su decisión sin preocuparse por Abram. El deseo egoísta de Lot de tener las planicies más fértiles, con pozos de agua, lo hizo asentarse cerca de las malvadas y pecaminosas Sodoma y Gomorra. Abram, por otra parte, confió en la promesa de Dios (Génesis 12:1-3, 7) sin importar lo que Lot decidiera. La toma de decisiones basadas en las promesas y mandamientos de Dios siempre nos proporciona paz.

Cuando excluimos a Dios de nuestra toma de decisiones, intencionalmente ignoramos las instrucciones de Dios. "Pero miraré a aquel que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a mi palabra. Y porque escogieron sus propios caminos, y su alma amó sus abominaciones. . . también yo escogeré para ellos escarnios, y traeré sobre ellos lo que temieron. . . Porque llamé, y nadie respondió. Hablé, y no oyeron, sino que hicieron lo malo delante de mis ojos, y escogieron lo que me desagrada" (Isaías 66:2-4, RV). Nuestro orgullo y egoísmo sugieren: "Yo haré esto. Si Dios no me detiene, debe estar bien." En cambio, debe buscarse la dirección y sabiduría de Dios antes de que tomemos cualquier decisión.

Su mente – Ocasiona decisiones impetuosas (1ra de Corintios 3:18-19).
La Presión de los Compañeros – Produce confusión y fracaso (Jeremías 7:24).
La Mente de Dios – Le da a usted sabiduría sobrenatural (Proverbios 2:3-8).
Toma de Decisiones - Una Experiencia de Humildad
Uno de los factores más difíciles en la toma de decisiones es humillarse uno mismo, al admitir que no lo sabemos todo, o que hemos fracasado. El Rey David experimentó personalmente cómo su decisión ocasionó que Israel fuera castigado. Luego de la desobediencia de David, Dios le ofreció tres opciones de castigo -- hambruna, destrucción a manos de sus enemigos, o una plaga (1ra de Crónicas 21:7–15). David basó su siguiente decisión en la misericordia de Dios. David comprendió que someterse a los mandamientos de Dios era la decisión correcta, aún si era dolorosa.

Todos cometemos errores graves, decisiones que hubiéramos querido no haber tomado jamás. Moisés ignoró las instrucciones de Dios (Números 20:8-12), Sansón entregó su fuerza (Jueces 16:17-21), y Pedro negó repetidamente conocer a Jesucristo (Juan 18:25-27). Cada uno de estos grandes hombres se humilló pidiendo el perdón de Dios. "Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad." (1ra de Juan 1:9).

La trayectoria en cualquier toma de decisión puede ser difícil y larga. Al confiar en los planes de Dios para nuestras vidas, experimentamos paz en las tormentas de la vida. Cualquier decisión que nos acerque más en nuestra relación con Dios asegura el éxito (Jeremías 29:11-13). Cuando sometemos nuestra voluntad (orgullo y motivos egoístas) a la voluntad de Dios, Él nos da los deseos de nuestro corazón (Salmo 27:3-5).

TALLER DEL MAESTRO SEÑORAS Y SEÑORITAS

lunes, 27 de septiembre de 2010

Nancy Amancio - Arrebato -

TALLER DEL MAESTRO SEÑORAS Y SEÑORITAS

GUERREAS EN EL TALLER DEL MAESTRO







princesas en el taller del maestro

DIOS ES AMOR

*** Dios es Amor ***





Alguien te ama y suspira por estar
siempre contigo en todo lugar.
Alguien te ama, no es una ilusión.
¡Quiere vivir en tu corazón!

Es verdad, Alguien te ama, ¡y por esa razón te ha hecho llegar
este pequeño mensaje! ¡Alguien te quiere y desea brindate felicidad!
Todos anhelamos amar y ser amado. ¡Para la mayoría de la gente
el Amor es lo más sublime y grandioso que hay!
¡Todas las bellezas de la Creación son una obra de Amor:
la hierba, los árboles, las flores, un espléndido atardecer,
el romanticismo de una noche estrellada, las maravillas
del mundo animal!
Aun nuestros animalitos domésticos entienden el lenguaje del amor.
Es más, a veces ni sobreviven sin él.
Mueren de pena y tristeza.
Los seres humanos también ansiamos amor.
Tan es así que hay ocasiones en que nos morimos de pena por falta
de amor, pues todos tenemos necesidad de afecto y ternura y de
querer a alguien.
Esa es la razón fundamental de nuestra existencia.
Por eso vinimos al mundo, porque Alguien nos quiere y desea
que seamos felices, que amemos y seamos amados, que disfrutemos
de todas las cosas lindas de la vida, y que tengamos de todo
en cantidad suficiente.
Pero ¿por qué hay tanta tristeza y sufrimiento en el mundo?
¿Por qué tanta perversidad, horror, dolor y muerte?
¿Por qué no puede ser todo bondad, belleza, encanto,
placer y deleite?
Lo cierto es que en un principio todo se creó con esa intención.
Pero el hombre optó por el egoísmo, la desconsideración y la falta
de amor por los demás, y al tomar su propio camino,
se alejó del Paraíso de la Creación original.
Todos somos culpables en alguna medida de la desolación
que vemos en el mundo.
Seamos sinceros. ¿No es cierto que todos hemos obrado
equivocadamente en alguna ocasión y hemos hecho cosas que sabemos
que estaban mal, que luego no pudimos remediar?
El Amor es capaz de sanar cantidad de heridas y devolver la alegría
a muchísimos corazones, aliviar gran parte del dolor y la agonía
que sufre la humanidad y evitar innumerables muertes.
En cambio, el egoísmo, la codicia, la inconsideración y la terquedad
son causa constante de la mayor parte de las penas del mundo,
incluidas las que padecemos nosotros mismos.
Hemos echado a perder el Paraíso terrenal que se nos confió para
nuestro deleite.
Lo hemos arruinado con tanto odio, avaricia, violencia,
dolor, guerras y matanzas.
Sin embargo, hay Alguien que quiere salvarte de todo eso,
y un día hasta piensa sacarte de aquí, y ahora mismo desea guardarte
de muchas de esas cosas y concederte alegría, paz, satisfacción,
felicidad, y por sobre todas las cosas,
¡Amor! ¡Amor por Él, por los demás, y hasta por ti mismo!
Él es el Dador de todo lo bueno, el Dios del Amor.
Nos ama porque Él es el Amor mismo.
¡Sí, hay Alguien que te quiere, Alguien que sintió tanto amor por ti
que entregó Su Vida para salvar la tuya!

«¡Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos!»
(S.Juan 15:13.)

Eso mismo hizo Él por ti, para pagar por tus pecados y ofrecerte
Su Amor y Su perdón.
Lo único que te pide es que te vuelvas a Él y te arrepientas,
que lo aceptes en tu vida y creas en Él, y que te muestres agradecido
por lo bueno que ha sido contigo.
También quiere que trates de brindar amor y hacer el bien a los demás,
tal como Él ha hecho contigo, tal como Él desea hacer contigo,
y como hará aún en mayor medida en el futuro lleno de esplendor
que nos aguarda, cuando Él venga a buscarte para llevarte a Su Reino celestial.
En ese entonces se apoderará de la tierra y la regirá con justicia, Amor, misericordia, benignidad y bondad. ¡Acabará con todas las guerras,
el odio y la enemistad, y creará un fascinante y glorioso Reino
de Amor aquí en la tierra para que todos lo gocemos por la eternidad!
A ese Ser extraordinario que te ama no tienes más que pedirle que venga
a vivir a tu corazón.
Se llevará todas tus lágrimas y disipará todas las angustias provocadas
por la soledad, el menosprecio, el miedo y la confusión.
¡En su lugar te dará una vida magnífica llena de amor que durará
eternamente!
¿Le pedirás hoy mismo a Jesús que entre en tu corazón?
Él es el fruto de Amor del propio Dios, la señal de Su Amor,
Su propio Hijo, enviado al mundo para transmitirnos el Amor del Padre,
¡aunque fue perseguido y crucificado por gente perversa!
¡Pero gracias a Dios, resucitó y volvió al Cielo para reunirse con el
Padre de Amor, y ahora está con nosotros, así como Su maternal
y tierno Espíritu Santo!
¡Imagínate, el propio Hijo de Dios murió por ti por amor a fin
de que tú vivieras! Él quiere que seas feliz, yo quiero que seas feliz,
¡todos queremos que lo seas! Somos muchos los que te amamos y podemos
ayudarte si acudes a Él y a los que te quieren.
Lo tienes a tu alcance ahora mismo por medio de esta pequeña oración:

«Padre celestial, ¡te ruego que me perdones las cosas malas que he hecho!
Lo siento mucho.
Quiero recibirte en mi corazón por medio del Amor de Tu Hijo Jesús.
Enséñame a amarte y a amar a mis semejantes, para que pueda hallar
felicidad y brindársela a los demás. Instrúyeme más en Tus caminos
mediante Tu maravilloso libro, la Biblia.
En el Nombre de Tu Hijo Jesús, amén.»
Si has echo esta oración creyendo en tu corazón,
ten por seguro que Jesus desde este momento vive en tu
corazón y te cambiara la vida.
Es lo mas hermoso tener al Señor ya que ya no estas mas solo
y tienes al creador de todo a tu lado ayudandote y bendiciendote.


Pero, ¿qué dice? "CERCA DE TI ESTA LA PALABRA, EN TU BOCA
Y EN TU CORAZON," es decir, la palabra de fe que predicamos:
que si confiesas con tu boca a Jesús por Señor, y crees en tu corazón
que Dios Lo resucitó de entre los muertos, serás salvo.
Porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca
se confiesa para salvación.
Pues la Escritura dice:

"TODO EL QUE CREE EN EL NO SERA AVERGONZADO."
Romanos 10 : 8, 11
El eterno amor de Dios es el mismo ayer, hoy y siempre .


¡Por fin me podía tomar un muy necesario descanso de dos semanas!

En efecto, estaba contenta ahora que iba a poder relajarme con familiares
y amigos, lejos de las exigencias constantes que afronto en mi servicio
voluntario en el extranjero.
Llegué a la casa de mi familia y me disponía a olvidarme de todo, cuando de
pronto sentí el impulso de revisar mi buzón de correo electrónico.
Ni siquiera había sacado la computadora portátil de la bolsa de viaje.
Tuve la tentación de no molestarme en encenderla, procuré desechar la idea,
pero no lo conseguí. Al final cedí.
Tan pronto me conecté, vi que mientras viajaba se me habían acumulado
los mensajes en el buzón.
Empecé a verlos cansadamente, separando el spam de los de
los verdaderos mensajes.
Mientras lo hacía, me sorprendió encontrar una nota de alguien
que solo había visto unas cuantas veces y de quien no había
tenido noticias en mucho tiempo.
Después de leer el mensaje, llegué a la conclusión de que esa
debió ser la razón
por la que sentí apremio por revisar el correo.
El mensaje decía:

En estos últimos meses he estado muy ocupada.
Siento no haber podido comunicarme antes. ¿Me perdona?
Extraño los artículos y cartas amables que me enviaba.
Hace veinte días, unos análisis revelaron que tengo cáncer.
Gracias a Dios, aún no se ha extendido. Me van a operar muy pronto.
Me gustaría que pudiera venir al hospital ese día o cualquier otro.
Estaré ingresada una semana. ¿Podría venir?
No me da miedo operarme, ¡pero estoy un poco preocupada!
Cuando me enteré, me sentí traicionada.
Confiaba en mi salud, y de pronto resulta que tengo cáncer.
Estuve muy desilusionada y triste.
Luego oré. Dios no me abandonará.
Nunca lo ha hecho.
Su bondad y misericordia siempre me han acompañado y protegido.
Me dio señales que ayudaron a que la enfermedad se descubriera
en una fase temprana. Creo que me pondré bien.

Muy conmovida por que aquella buena mujer me pidiera ayuda
en un momento de necesidad, envié una nota a una compañera
que se encontraba en casa, pidiéndole que se comunicara con
ella en mi ausencia y
si fuera posible,
la visitara y orara por ella.
Asimismo, le envié un correo en que le explicaba
que estaba ausente y había pedido a una amiga, a la que también conocía,
que la llamara y visitara. Le prometí orar por ella.
Casi un mes después volví a casa, y me enteré de que mi compañera había
visitado a aquella señora en el hospital poco después de la operación.
El día anterior había pasado por una experiencia en el umbral de la muerte
por complicaciones postoperatorias.
Mientras se encontraba entre dos mundos, tuvo la clara sensación
de que aún no había llegado su momento de morir,
de que Dios todavía tenía planes para su vida.
La habían revivido y agradecía estar viva pero, por raro que parezca,
la experiencia la había dejado preocupada y deprimida.
En ese estado la encontró mi amiga; sin embargo, después de que
conversaron un rato,
la señora se animó, mientras asía con fuerza la mano de mi amiga
orando juntas para que cobrara ánimo
y se recuperara con celeridad.
Telefoneé a la señora, y me explicó cómo la había conmovido la visita.
Que mi compañera fuera a visitarla significó mucho para ella.
«Fue como si me hubiera visitado un ángel», me aseguró.
Aunque la batalla por su salud aún sigue, nos dio sinceramente
las gracias a las dos por nuestras oraciones,
y nos pidió que la visitáramos en su casa.
Antes de visitarla, tuve el impulso de preparar una tarjeta con algunos
pasajes de las Escrituras en los que Jesús, el Gran Médico, mientras
estaba en la Tierra,
«anduvo haciendo bienes y sanando a todos», indicando también
que según la Biblia Él
«es el mismo ayer, hoy y por los siglos» (Hechos 10:38; Hebreos 13:8).
Mientras oraba y pensaba en qué más decirle, escribí a vuelapluma
palabras sanadoras y llenas de amor.
Jesús mismo quiso expresar Su amor y preocupación por aquella
buena mujer, y Él terminó el mensaje con una breve
oración que podía hacer.
Conversamos en su casa y le expliqué que mientras oraba había
recibido un mensaje de ánimo para ella de parte de Jesús,
y que esperaba que no se ofendiera si se lo entregaba.
Respondió categóricamente: «Aunque soy de otra religión,
¡amo mucho a Jesús!
Cuando estoy preocupada o intranquila,
escucho un cassette de un cantante famoso
que grabó dos oraciones, una para Semana Santa y otra para Navidad.
La que habla de la crucifixión y resurrección de Jesús me infunde
mucha tranquilidad.»
Abrió el sobre que contenía la carta y se puso a leer el mensaje de Jesús,
y se le llenaron los ojos de lágrimas.
Un poco avergonzada, preguntó si podía leer el resto más
tarde aquella noche.
La siguiente vez que hablé con ella, me dijo que había vuelto a leer
todo el mensaje y hecho la oración.
Y añadió: «Me llené de paz interior. Ahora he aceptado lo que
Dios me ha traído en la vida, y estoy segura de que todo se resolverá.»
Seguimos conversando, y las dos llegamos a la conclusión de que
lo que en realidad
importa en la vida es lo que creemos, amar a Dios y aceptar Sus palabras.
¡Cuánta diferencia haría en este pobre mundo en el que cada vez
se levantan más barreras entre los pueblos y las religiones
si saliéramos al encuentro de los demás, tendiéramos puentes y nos concentráramos en lo que en realidad importa: amar a Dios y comunicar
Su amor al prójimo! Es evidente que Dios no hizo acepción de personas
cuando envió a Jesús al mundo para manifestar Su amor a toda la humanidad.
El eterno amor de Dios no ha cambiado, y Jesucristo, que sanó corazones
y cuerpos, es el mismo ayer, hoy y siempre.

Mensaje de Jesús con palabras de ánimo
En la tarjeta que acompañó el mensaje, escribí:

Me alegra que pudiéramos vernos hoy. Desde que recibí su correo la tengo presente en mis oraciones. Aun en situaciones difíciles como la enfermedad,
Dios puede sacar algo bueno.
Una bendición que ya ha sacado de esta es que nos ha acercado a las dos.
También nos ha ayudado a recordar las cosas más valiosas en la vida,
como vivir cerca de Dios y preocuparse por el prójimo.
¿Alguna vez ha percibido una suave voz que la guía y le habla al corazón,
animándola o brindándole paz? Pues bien, cuando rogaba hoy por usted tuve
esa experiencia y recibí unas palabras muy bellas. Son de Jesús, de quien dice la Biblia: «Recorrió Jesús toda Galilea sanando toda enfermedad y toda
dolencia en el pueblo.
Y le trajeron todos los que tenían dolencias y los sanó. (Mateo 4:23-24).
Y también: «Estas señales seguirán a los que creen: sobre los enfermos
pondrán sus manos, y sanarán» (Marcos 16:17-18).
«Todas las cosas son posibles para Dios» (Marcos 10:27).
Ojalá que el siguiente mensaje personal de Jesús le sea una fuente
de fortaleza y ánimo. La quiero mucho y seguiré orando por usted.



Hace muchísimo tiempo, cuando estuve en la Tierra, hacía el bien a
todo el que se cruzaba por Mi camino.
Sanaba a los enfermos, consolaba a los afligidos, alentaba a los desanimados
y fortalecía a los débiles. ¡Y Mi amor y poder siguen siendo los mismos!
Todavía anhelo sanar a los que sufren, y aún animo a los que llevan cargas
pesadas y pasan por momentos difíciles.
Desde que volví al Cielo he ayudado a muchos que acudieron a Mí y
me contaron sus necesidades, y anhelo hacer lo mismo contigo.
Todo lo que necesitas es fe.
Basta con que creas que Yo, el Gran Médico, todavía puedo sanarte.
Solo estoy a una plegaria de distancia, amada Mía.
Cuéntame tus problemas, temores y preocupaciones, y pídeme que
te ayude y sane.
En algunos casos, la curación del cuerpo toma tiempo
-Dios conoce el mejor momento para ello- pero puedo darte en un instante
la salud del corazón, serenidad en lugar de confusión y fe en vez de temor.
Aunque no lo puedes entender con la mente, si pides con fe, cuando ocurra
sabrás que te he tocado.
Acude a Mí cuando quieras, y te daré alivio. Puedes orar:
«Jesús, creo que eres el Gran
Sanador y puedes darme Tu poder sanador del Cielo.
Sé que no soy perfecta ni merezco tan magnífico regalo,
pero creo que por la misericordia y gran amor de Dios me lo puedes hacer.
Te ruego que cures mi corazón y elimines el temor y la preocupación, que me
des Tu paz, que sobrepasa todo entendimiento, y sanes mi cuerpo con Tu poder.
Confío en que eres capaz y en que, si te abro el corazón, jamás me dejarás,
sino que serás un Amigo eterno a quien pueda acudir en busca de ayuda
cuando lo necesite.
Te agradezco que escuches mi oración.»
Es así de sencillo. Oigo el más tenue suspiro de tu corazón.
Incluso respondo a los que claman a Mí con una pizca de fe
-una fe tan pequeña como un grano de mostaza-.
Vine al mundo para manifestar el amor de Dios a toda la humanidad,
y es un amor eterno.
Puedes confiar plenamente en este amor.
Y recuerda: solo estoy a una oración de distancia.
Jesús
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhiSx2GkqsdMNetx4Av56xhIqQDTo7Pm5p0Y7PdVgXDQxRK5AdnK41Llk3I1n5H891ecHKnuqLn4lHFc9B5Cm9k-mtvq2meCN-t84964Tc89tQ3AXbm1e84XGLx2PC4RNpfVnr5JDUNaCM/s1600/hijadelaltisimo51pg.jpg
Jesús vino gloriosamente a esta Tierra, cumpliendo todas y cada
una de las profecías del Antiguo Testamento.


Este ha sido el advenimiento más importante en la vida del planeta...
Nació aquí el hombre más extraordinario de todos los tiempos,
nacido de mujer y nacido bajo la ley
(Gal4:4): JESUS, a cuya invocación se dobla toda rodilla,
de los que están en los cielos y en la tierra y debajo de la tierra
(Flp 2:10)

El Mesías esperado por años para redimir al género humano, venía en pañales,
a la cuna más humilde, dentro de la servidumbre humana, a mostrarnos
el Camino para recuperar la bendición perdida por causa de Adán...
el que le arrebataría nuevamente al diablo, todos los reinos del mundo,
del que hablarían todos, el que inspiraría la escritura de miles de libros
y el que provocaría las más grandes polémicas. El Salvador del mundo,
el que se sentaría a la derecha del Padre legaba en el tiempo y
el momento preciso.

Jesús... el del Nombre más dulce sobre la tierra, es el guiador,
el que respondía a la profecía de Miqueas, el que apacentaría al
pueblo de Dios y cuyo Reino no tendrá fin...

Nada irrumpe en la historia universal en forma tan fuerte, como el arribo
de Dios entre nosotros... ¿Por qué el planeta tierra y no otra galaxia?
No lo sabemos... lo que sí sabemos es que usted y yo estamos aquí y
podemos alabar a Dios por ello y recibir la bendición que todo
eso significa.

¿Quién es Jesús?

¿Qué importancia tiene su aparición y su presencia? Habría que leer la Biblia
varias veces para empezar a comprenderlo. Y el que tengamos usted y yo,
beneficio con ello, es sólo parte del amor y la misericordia del que
nos amó primero...

La personalidad de Jesús es tan fuerte, que nadie la resiste.
Por eso, es fundamental conocer a Jesús. Saber de El, es algo capital,
para todo nacido en cualquier país de este planeta, porque por medio de
El nos son revelados los misterios del universo y nuestro destino...

Venir a este mundo y no conocer a Jesús, es el más grande desperdicio de vida...
más le valía al hombre no haber nacido. Nosotros alabamos a Dios,
porque sin saber por qué y sin ser dignos, ni merecedores, nos ha sido
revelado el Hijo de Dios.

¿Quién es Jesús?

Si queremos decirlo en pocas palabras, diremos solamente: Jesús es Dios hecho
carne, que viene a este mundo para que le conozcamos, le amemos y vayamos
a vivir con El por la eternidad.

Tenemos pocos datos de su vida antes de los 30 años... Sabemos que nació
de una jovencita, virgen de Israel, desposada con un carpintero llamado José...
Solo que Jesús, no fue engendrado de sangre, ni de voluntad de carne,
ni de voluntad de José, sino por la voluntad de Dios (Jn 1:13)

Hay datos de que fue circuncidado y presentado en el templo (Lc 2:21-222)
Y Lucas nos habla de su infancia hasta los 12 años, una infancia poco común,
porque no se parece a la de muchos niños de hoy...

Está escrito que Jesús estaba sujeto a sus padres (Lc 2:51) y su crecimiento
era no sólo en estatura, sino en sabiduría y en gracia, delante de Dios
y delante de los hombres (Lc 2:40,52)

Después de su adolescencia, no tenemos más antecedente.
18 años de su vida, en que no se aportan datos, pero por lo que Lucas
dice de su adolescencia, es perfectamente deducible que Jesús,
ni fue estudiante de las profecías de la gran pirámide, ni estuvo en América,
ni en Cachemira, ni le vienen todas las historias que los que hacen
telenovelas, han querido adjudicarle, porque en el Evangelio,
de su adolescencia se nos informan quién era Jesús y cuál podía ser su comportamiento. Desde los 12 años ya estaba en los negocios de su Padre...
y para un ministerio tan especial, debió ocupar los 18 años, para prepararse
en un sólo tema: Las Escrituras (por eso las sabía muy bien).
Prueba de ello, es que cuando adulto, a los 30 años que inicia su vida pública,
es capaz de ayunar 40 días y 40 noches, cosa que no se logra de un día
para otro... requiere disciplina y profundidad en la Palabra Dios.

Tenía un oficio, el que aprendió de José, pero una vez que inicia
su ministerio, deja de hacer muebles de madera, para empezar a hacer
hombres y mujeres aptos para el Reino de Dios.
Su trabajo ahora era predicar el evangelio del reino, enseñarlo
y sanar toda enfermedad y toda dolencia del pueblo (Mt 4:23)
y perdonar pecados. Su misión sería redimir al género humano.
Sólo que El necesitaría una calidad muy especial...
El no podría tener en sí, mancha, ni contaminación, ni pecado...
y esa es la característica esencial, que sobresale entre todas
sus virtudes: Aun cuando estuvo sujeto a tentaciones, nunca cometió pecado,
según Dt 32:4.ninguna iniquidad, dice, y esto es confirmado en todo el
NT y 2Cor 5:21. Sobre la cruz El se hace pecado por nosotros,
pero El, nunca comete pecado...

Pedro le llama Cordero sin mancha y sin contaminación...
Algo muy parecido dice Juan en su primera carta (1Jn 3:5 ).
Esto es lo que hace diferente a Jesús de cualquier otro ser humano...
Y lo más interesante es que Jesús mismo, se confiesa sin pecado (Jn 8:46)
y nunca encontró El, a alguien que le pudiera redargüír de pecado.

Esto hace de El algo verdaderamente singular, ya que el Mesías que vendría,
tendría ésta y otras características más, que se reúnen en El y por lo
cual Jesús es el único que alcanza el título de SEÑOR y DIOS.

Una de las cosas más interesantes, es que Jesús siendo Dios, no se aferra
a esa forma, sino que tomando forma de siervo, se hace semejante a nosotros...
se humilla a una condición humana y se hace obediente hasta la muerte en
una cruz (Flp 2:7-9) Y lo más significativo es que
cuando leemos el Evangelio, se nos revela a un Jesús hombre...
Los que escriben de El, nos hablan de un Jesús que tuvo hambre,
sed, cansancio, angustia, pena, dolor... Jesús sabía llorar, podía
sentir enojo, contra quienes alteraban la santidad del templo,
pero siempre fue ejemplo de humildad, de amor y de servicio.

Una vez le dijo a los suyos: Yo no vine a ser servido, sino a servir,
es decir, que nadie lo vestía, ni le daba el alimento en la boca, ni
lo paseaban en un carrito... y era Jesús, el Dios vivo...
No hay en el mundo otro ejemplo de humildad y sencillez.

Pasó por este mundo, haciendo el bien y enseñando cómo vivir la vida
y cuando cumplió su tiempo, en la cruz, se convirtió en el Mediador
del nuevo pacto... El remitió -dice Hebreos- las transgresiones que había
bajo el primer pacto, para que los llamados recibamos la promesa de
la herencia eterna... (Heb 9:22)

 






Con su sangre nos compró a una vida eterna y se convirtió en el único
y más perfecto Mediador entre Dios y nosotros.
No hay ningún otro mediador ni mediadora.
Dios está en los cielos y para llegar a El, el único Mediador es Jesús...
porque El es el Unico que descendió del cielo y subió al cielo...
y está sentado a la diestra y nadie más (Jn 3:13)
y cuando Juan el Bautista habla de ello, afirma algo que no tiene oposición:
El que de arriba viene, es sobre todos...

Los cristianos lo proclamamos Señor, Dueño, Amo, Rey, Jehová Dios
hecho carne... porque por la Escritura estamos plenamente convencidos
que Jesús es Dios...

https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMuYkRlARfEIya5IgOkHZ4R6kdzXSTZOpG1A1EV7DX58-9UdctHvHuD_3sT2XJJ8_qK0II5797ClFOwpbgxH2buZR527uNnSts_UX6Zl7HC7Sklswe_V9Q2xDg6H6mekBLOTnUXRZfi_o/s1600/jesusreyysalvador.jpg

LA COPA DE LA VIDA

LA COPA DE LA VIDA.






La vida es una copa plena de felicidad, pero nunca se nos da llena.
Nos dan un sorbito de vez en cuando, un sorbito con el que tenemoss que ir llenándola, gota a gota, todos los días, para sobrevivir.

No te la pases gimiendo tus desgracias, pronosticando tragedias imaginarias, o asustado por males, que probablemente nunca lleguen.
Nacemos para luchar por la felicidad, para crearla, para construirla a pesar de tristezas, desencantos, errores, malas jugadas e irremediables imprevistos.

La felicidad no se encuentra en bienes y placeres.
Se actúa bien y ella sola se va presentando.
La felicidad no es estar añorando todo lo que nos falta, sino acoplarnos a todo: lo que tenemos y lo que no tenemos.



No vendas tu felicidad...
¡regálala!
No busques fórmulas sencillas, ni baratas para tenerla. 



Ingredientes de la felicidad:
Compartir lo que tienes.
Amar sin exigencias.
Perdonar sin cicatrices.
Aceptar sin perfecciones.
Agradecer lo que te dan.
¡Y no rendirte nunca!.

Todo tiene que ir armonizando:
Del panal, un poquito de miel.
Del mar, un poquito de sal.
De la vida, un toque de optimismo.
De la imaginación, sueños.
Del dolor, raíces fuertes.

Y de la fe, solidez de roca.

Porque no sabemos cómo llenar nuestra copa.
Porque no damos a la vida todo lo que podemos darle y
Esperamos, a veces ingenuamente, que la vida nos regale, pero sin pagar el precio.
¿Por qué no somos felices? 



No olvidemos que la mejor manera de ser feliz, es: ? Ocuparse de que ótros lo sean, dar sin esperar,
servir con mucho AMOR y por AMOR. Demos mucho de nosotros y la felicidad llegará sola. Llenemos nuestra copa y deleitémonos, siendo...
¡FELICES!



Salmos 90:14

"Dios nos da grandes alegrías cada dia".